miércoles, 30 de julio de 2008

Resumen del capítulo 4

Takiko y Tomite continuan con su viaje de encontrar a las siete estrellas de Genbu por todo el país y van a parar a una pequeña ciudad, donde salvan a una niña que quedó atrapada en un edificio en llamas. Al ver los poderes del hielo de Tomite, toda la ciudad se da cuenta de que es una estrella de genbu y los rechazan, pero la familia de la niña a la que salvaron les da cobijo.
Allí les explican la leyenda entera de la sacerdotisa y les dicen los nombres de las legendarias siete estrellas.
Takiko quiere ser capaz de defenderse sola y por eso le pida al abuelo de la niña, que es un fabricante de espadas y hachas, que le fabrique una "Lanza Naginata", como la que ella empleaba en su instituto y que sabe usar muy bien.
El buen hombre se la fabrica, pero al padre de la niña no le hace gracia que la sacerdotisa y Tomite esten en su casa.
Mientras en Ju-dong, se encuentra Uruki haciendose llamar "Taki" y haciendose pasar por soldado de allí, justo cuando asignan una misión. Junto con soldados más, Zi-xi y Fe-Quian, tienen que matar a la sacerdotisa y a las siete estrellas de genbu. A Uruki esto no le hace mucha gracia, ya que se ve incapaz de atacar a Takiko... Junto con los soldados, le preguntan al padre de la niña si ha visto a la sacerdotisa de genbu y a sus estrellas, le sobornan con dinero y el padre de la niña acepta, diciendoles donde se encuentran. Uruki decide adelantarse hacia la ciudad dejando un poco atras a sus compañeros soldados. Mientras, en la ciudad, un niño misterioso que atraviesa las paredes les anuncia a Takiko y a Tomite que el enemigo se acerca. Los dos corren a recoger sus cosas, pero antes de que se puedan marchar irrumpe Uruki en la habitación, rompiendo la ventana en pedazos.

Uruki agarra a Takiko rapidamente y se la lleva volando, dejando allí solo a Tomite a quien, al cabo de unos segundos, le atacan los soldados Fe-Quian y Zi-xi. Mientras, Uruki ha llevado a Takiko a las afueras de la ciudad y le pide de nuevo que vuelva a su mundo, que si sigue en ese lugar la matarán. Takiko le pregunta que qué hace allí y el chico le responde que le han encargado la misión de matar a la sacerdotisa y a las estrellas. Takiko no entiende y le pregunta a Uruki que por qué se unió al país enemigo, el que le responde que lo hace para poder vengarse de su padre, quien intenta matarle y que no quiere tener nada que ver con la sacerdotisa. Entonces Takiko le reprocha que, si no quiere tener nada que ver con ella, que por qué la protege siempre que puede, a lo que Uruki se da cuenta de que ni él mismo lo sabe. La chica, decidida, se marcha de vuelta a la ciudad para ayudar a Tomite, quien está siendo atacado brutalmente.
En cuento llega ella a la ciudad, Zi-xi comienza a atacarla pero Takiko se defiende bastante bien con su Naginata. Fe-Quian golpea a Tomite, por lo que Takiko se distrae y Zi-xi aprovecha para atacarla brutalmente. Takiko y Tomite se ven perdidos justo cuando unas hojas de viento cortante hieren a Zi-xi y le cortan el brazo a Fe-Quian. Los dos, sorprendidos, buscan al responsable del viento y se encuentran a Uruki (mujer), cubriendo y protegiendo a Takiko, y viste con ropa distinta, para que no le descubran. Los soldados deducen que "Uruki mujer" es una estrella de genbu, al igual que Tomite, y, como la ven demasiado fuerte, deciden escapar. Uruki le dice a Takiko que no la protege por las historias de que es la sacerdotisa y él es una estrella, que la protege simplemente porque siente el impulso de hacerlo, a lo que Takiko se sonroja. En ese momento, aparece una flecha de la nada que hiere a Uruki en el hombro, pero no se sabe quien la ha lanzado. Takiko le pregunta a Uruki si se encuentra bien, pero ella (aun es mujer) le dice que ya se lo había advertido, que a este paso, moriran todos, sobretodo él. Y se marcha volando dejando a Takiko sorprendida junto a Tomite...
FIN DEL CAPÍTULO 4.

No hay comentarios: